San Agustin.
  • La convicción de que el hombre es imagen de Dios le lleva a advertir en al alma como un reflejo de la Trinidad de una triplicidad de facultades: memoria, inteligencia y voluntad (amor).
  • El conocimiento es fruto del amor y la verdad no es aceptable más que a través de la caridad, expresión suprema del amor cristiano. 
  • La fe condiciona el entendimiento, y el punto de partida es el alma, lo que más divino tiene el hombre.