Una membrana mucosa, se encuentra al comienzo del tracto genital, justo dentro de la abertura de la vagina.
En las mujeres vírgenes, el himen suele rodear el orificio como un anillo ajustado, y en ocasiones puede llegar a cubrirlo por completo.
El himen contribuye a proteger el tracto genital, pero no es necesario para la salud.
Puede desgarrarse en el primer intento de relaciones sexuales o también ser tan blando y flexible que no llegue a producirse desgarro alguno.
El himen también puede rasgarse con algún esfuerzo o por la inserción de un tampón o un diafragma.
Por lo general, el desgarro causa un leve sangrado. En las mujeres que han tenido relaciones sexuales, el himen puede pasar desapercibido o reducirse a unos pequeños residuos de tejido alrededor del introito vaginal.