2.1.1. Revolución de febrero.
  • A su llegada a San Petersburgo, en 1903, Rasputín fue recibido como un hombre santo y en 1908 fue presentado a la esposa del Zar, Alejandra Fiódorovna, quien ya había oído hablar de sus supuestos poderes curativos. 
  • La zarina pensó que podría curar a su hijo Alexis el heredero del trono ruso, que padecía hemofilia. 
  • Se especula que consiguiera aliviar su dolencia mediante hipnosis; en cualquier caso, esto hozo que se ganara la confianza de la zarina y también la de Nicolás II, fuertemente influido por la zarina. 
  • Investido de un inmenso poder, Rasputín designó a muchos altos funcionarios del gobierno, aunque ninguno fue competente. 
  • A principios de la Primera Guerra Mundial, Rusia atravesaba un momento crítico.