Sumeria.
  • Asumiendo que existían asentamientos humanos desde el Neolítico como demuestra la cultura de Jarmo, (6700 a. C.-6500 a. C.) y en el Calcolítico las de cultura Hassuna-Samarra (5500 a. C.-5000 a. C.), El Obeid (5000 a. C.-4000 a. C.), Uruk (4000 a. C.-3200 a. C.) y Yemdet Nasr (3200 a. C.-3000 a. C.).
  • No existen registros escritos de esa etapa para conocer el origen de este pueblo, y tampoco los cráneos hallados en los enterramientos aclaran el problema de su origen, debido a que están representadas tanto la dolicocefalia como la braquicefalia, con algunos testimonios del tipo armenoide. 
  • Se investigan las esculturas sumerias que muestran un alto índice de cráneos braquicéfalos en sus representaciones que quizá podían dilucidar la procedencia de este pueblo, junto con las coloraciones y las dimensiones de las esculturas, que son una mezcla entre caucásicos y miembros de raza negra. 
  • Con todo esto no es suficiente evidencia para solucionar el problema puesto que la plástica podría haberlas idealizado, como pasaba en las esculturas egipcias.